La que, hasta hace unos días, se conociera bajo el título de asociación de Nuestra Señora del Rocío de Arroyo de la Miel (Benalmádena), recibió el pasado 19 de diciembre la grata noticia de que el Obispo de Málaga, Monseñor Jesús Catalá, había firmado el día anterior el Decreto de Erección Canónica que le concede el título de hermandad.
Este hecho supone un paso importante y decisivo en la historia de los rocieros del Arroyo, que esperan en un futuro no muy lejano ser otra corporación filial a la hermandad matriz de Almonte. Por esta razón, la próxima peregrinación para venerar a la Blanca Paloma en la gran romería de Pentecostés les hará caminar junto a los hermanos de la hermandad de Fuengirola, a quienes han nombrado como madrina de la corporación de gloria.
Ya, en la pasada Misa sabatina de la hermandad del Boquetillo, estuvieron junto a ellos los hermanos del Arroyo de la Miel, presididos por su hermana mayor: Almudena Cañete.
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